Por Pepe Treviño
El buffet no es para todos. Algunos son muy melindrosos y otros comen poco, pero cuando se trata de una serie de platillos cocinados al instante, esta idea cambia.
Así es Sumo Buffet, una cadena de restaurantes ubicados en CDMX, Querétaro y Puebla, que han revolucionado la forma de mover el bigote sin parar, donde puedes comer todo lo que quieras, desde sushi hasta hamburguesas, todo preparado al momento. Y si de plano te haces de la boca chiquita, también puedes pedir a la carta.
Nuestra experiencia sucedió en la sucursal ubicada en la plaza comercial Puerta Tlatelolco. Un nuevo spot que está modificando la vida urbana de esta zona de la CDMX, dándole vida y recuperando espacios públicos.
El sitio se conforma por dos áreas, hay un pequeño salón, perfecto para ser ocupado por un grupo de amigos, mientras en el exterior las mesas y taburetes se ubican en una amplia terraza, ideal para familias numerosas.
A MOVER EL BIGOTE
El servicio es muy amable, eficiente para tomar la orden, además que asesoran de forma correcta a cada comensal. Y como somos fáciles para dejarnos seducir por las recomendaciones, le hicimos caso al mesero y comenzamos con tres platillos. Un birriamen, pero de carne de cerdo; un temaki empanizado y relleno de pepino, queso crema, camarón y bañado con salsa de anguila; además del clásico rollo california que nos hizo ojitos de entre las 16 opciones, tanto fríos como calientes. Esta triada nos hizo saber que efectivamente, todo se prepara al momento y con buenos ingredientes y sazón.
Las porciones son adecuadas para que de esta manera el visitante pueda probar de todo un poco. Se comprueba con las Sumo Ribs, 120 gramos de costillitas de cerdo horneadas que pueden ser bañadas con alguna de las 14 salsas de la casa. La deliciosa Pulled Pork Burger, elaborada con carnita de cerdo sobre un suavecito pan brioche con la típica ensalada de col y zanahoria.
Los nigiris también llegaron a la mesa, hay cinco opciones, pero se nos antojó el de piña con salsa pico de gallo (muy fresco) para que fuera ligero, porque también nos fuimos por las tostaditas de pasta wonton con tártara de salmón, mayonesa de chipotle y salsa de anguila.
Cerramos con una banderilla flaming, tan picante que nos obligó a pedir unas cervecitas, un mezcal espadín y un calpis de fresa.
Desafortunadamente ya no llegamos al postre. Este bacanal nos obligó a bajar la guardia, nos dejó noqueados con mucho sabor, así que habrá una próxima vez para pedir a la carta, donde las porciones son más grandes.
PARA SABER MÁS
Sumo Buffet cuenta con una robusta carta de bebidas a precios muy razonables. Hay cocteles, destilados, cervezas y bebidas sin alcohol para los chavitos.
Están los cocteles Del Barrio a la Barra, que se refiere a los chupes chilangos, como los azulitos; también tragos de litros, jarras de cerveza y los clásicos carajillos pero con el twist de la casa.
El precio del buffet es de 249 pesos, solo hay que tener en cuenta que platillo que no se consuma se paga a la carta, esto para ser eficientes y mantener los costos, es obvio. Y desde luego que las bebidas no van incluidas.
¿Se te antojo? Entonces ubica tu sucursal, hay más de 28 alternativas cerca de ti.
EN LA RED: https://www.sumobuffet.mx
