Por Annie Hernández
La luz, con sus reflejos, sus cambios cromáticos y su temperatura, es una materia prima fundamental en el arte de Ann Veronica Janssens. Ella crea un universo etéreo, impalpable y transitorio. En palabras de la artista “Mi obra tiene mucho que ver con la sustracción, utilizando materiales que a veces son líquidos, a veces sólidos, a veces gaseosos. Siempre busco la dimensión mínima de las cosas. Mi práctica es como una gran danza, siempre en movimiento, como la luz”.
Ann Veronica Janssens, nacida en 1956 en Folkestone, Inglaterra. Estudió en L’École de la Cambre en Bruselas, país en donde radica, planea y ejecuta sus obras, el destino donde desarrolló una profunda conexión con el arte y los fenómenos naturales para influir en su práctica artística.

Durante más de 40 años Janssens ha dedicado su investigación artística a explorar fenómenos físicos intangibles como la luz, el color, el sonido y el aire para investigar los mecanismos de la percepción humana. Sus obras generan un amplio espectro de sensaciones y emociones, desde la alegría hasta el vértigo, desde la incertidumbre hasta la luminosidad cegadora y los estados hipnóticos que sumergen al espectador en entornos sensoriales únicos.

Entre todos los medios que utiliza para desarrollar su obra, Janssens prefiere la luz, esculpiéndola en sus diversas manifestaciones: líquida, sólida y gaseosa. Dando forma a la luz a través de niebla artificial, reflejos de color o suelos cubiertos de brillantina, logrando crear obras de arte que exploran la delgada línea entre la presencia y la ausencia. Estas piezas desafían la naturaleza estática de la escultura y la instalación, involucrando activamente a los espectadores a través del uso inteligente de la luz y su impacto en el entorno.
Gracias a la colaboración científica y tecnológica, las obras de Janssens acentúan los límites entre elementos contrastantes, como la luz y la oscuridad, el sonido y el silencio, lo tangible y lo intangible, estimulando una percepción alternativa de la realidad y a menudo resaltando aspectos sociopolíticos y culturales.

EXPOS ALREDEDOR DEL MUNDO
Dos exposiciones recientes de Ann Veronica Janssens han dejado una huella imborrable. La primera, “ Hot Pink Turquoise ”, se instaló en la South London Gallery de Londres, Inglaterra, en 2020; la segunda, “ Grand Ball ”, tuvo lugar en Pirelli HangarBicocca en Milán, Italia, en 2023. Ambas exposiciones exploraron un tema central de su obra: la relación entre la materialidad y la inmaterialidad de la luz.
En la South London Gallery de Londres, Janssens mostró su capacidad de simplificación, ocultando las complejidades inherentes a sus obras y resaltando las propiedades de los materiales y los efectos de la luz sobre ellos. En Milán, en Pirelli HangarBicocca, su carrera se exploró a través de una exposición diseñada para interactuar con la arquitectura industrial, expandiendo el tiempo y el espacio.

Y es que, quizá, al recorrer los caminos de la luz podemos revivir toda la historia del arte con proyectos que inspiran, asombran y conmueven, tal y como lo hace Ann. Los grandes artistas de ayer y de hoy nos enseñan que las invenciones y emociones en torno a la luz, componente fundamental de nuestra vida, son variadas y numerosas. Entre estas luminarias se encuentra Janssens, que ha hecho de la luz su material artístico primordial, la forma de energía poderos, y a veces fugaz, que se manifiesta como ondas electromagnéticas visibles para el ojo humano.